En la entrada número 100, he querido mostraros algo muy especial y como esta es la entrada número 200, pues la temática será la misma.
En agosto del año pasado, había ido de pesca con mi amigo Luis para intentar sacar alguna dorada. El caso es que por alguna razón me puse a buscar información sobre esta especie y así encontré el blog de Walter: La pesca de la Dorada en el Atlántico y Cantábrico.
Me sorprendió mucho que en la cabecera del blog ponía "La pesca de la dorada en el Atlántico y Cantábrico", pues esta especie siempre la asocié más al Mediterráneo. Que conste que sé de sobra que en nuestras aguas también habitan, pues hace años también tuve la fortuna de pescarlas.
Navegando por el blog llegué a leer su historia, la cual me emocionó sobremanera, pues me siento algo identificado por Walter, pues yo pude perecer en un incendio cuando contaba con pocos años. De aquel incidente solo me quedó una amplia quemadura en una de mis piernas y en cuanto al aspecto psicológico, he de decir que lo olvidé pronto, pues por fortuna no acabó en tragedia.
Pero sin duda, coincidía con muchos otros lectores de su blog, en que el afán de superación que ha mostrado es digno de alabanza, pues otra gente tira la toalla o no se pone metas a largo plazo. Yo soy más de la opinión que hace más el que quiere, que el que puede.
De alguna manera, comenzamos a hablar a menudo sobre la pesca de la dorada y otros temas de la vida. Él tenía más que aceptado lo que le había ocurrido y por eso desbordaba naturalidad en todo momento. De hecho algunas anécdotas que me contaba, me parecían un tanto desproporcionadas, pero él se las tomaba con humor.
Un día, hablando de la superación humana, le mostré un vídeo que lo emocionó de manera notable.
Este es el vídeo:
Le comenté que el ejemplo de superación de Clay Dyer era el más grande que conocía, pero que ahora tenía uno similar más cerca de lo que creía.
Después me presentó a uno de sus compañeros de fatigas "El Tanerito" y con él nos fuimos a ver unas zonas para pescar sargos.
En una ocasión le dije que me quería comprar una cámara de fotos y me dijo que conocía un lugar donde me podrían hacer una buena oferta, así que me fui para allá.
Estuvimos un rato larguísimo hablando con el dependiente, hasta el punto que casi nos echan jejeje.
A continuación nos fuimos a comer a un bar y allí me mostró una fotografía anterior a su accidente. Durante el postre hablamos un buen rato con el dueño del bar. Tras la comida nos fuimos hasta su casa, para sacar a pasear a su perro.
Ese día me di cuenta de cual era la fuente de la energía positiva de Walter: La gente que le rodea.
Todos y cada uno de ellos le aporta un extra de motivación, pues el trato recibido es comparable al que sólo la familia te puede dar.
Hace unos días fuimos de pesca juntos, a tentar a la dorada. Las jornadas fueron muy amenas, pero tengo que reconocer que acabé con las manos doloridas de preparar el cebo y en especial por el anzuelado de este. En mi interior pensaba: Y Walter lo hace durante horas y durante días seguidos.
¡¡Insólito!!

Por otro lado decir que si yo me considero un fanático de la pesca, Walter creo que alcanza el grado de locura, pues con la creación del grupo de fishbook "la pesca de la dorada" da otro paso más en el maravilloso mundo de la pesca y no es otro que el de compartir sus conocimientos.
A día de hoy, nos une una buena amistad y por eso te digo: Gracias amigo, por la gran lección que me has dado.
** Aprovecho para comentaros que en fishbook existe el grupo "Bloggeros del Norte", en el que se pretende llevar a cabo un encuentro de gente que dispone de un blog de pesca o que simplemente tiene nuestra misma pasión. Uniros al grupo y entre todos haremos de este encuentro un gran encuentro de una gran hermandad **