Ayer quedé con Luis, Antonio y Adolfo para acompañarlos en una jornada de pesca tras los sargos.
Para evitar el madrugón, dormí en casa de Luis.
A las 4:30 am ya estábamos en pie, y Bulma no iba a ser menos. Sin embargo, en esta ocasión, la inseparable compañera de Luis no nos acompañaría, pues la zona en la que pescarían mis compañeros es bastante peligrosa.
Poco más de dos horas en la carretera, para llegar al destino.
Mientras se aguardaba el momento propicio de la marea, los pescadores fueron montando los equipos. Había que disponer todo para moverse sólo lo imprescindible.
Desde las alturas divisaba a mis compañeros.
El mar tenía muy buen color y las olas dejaban pescar en la zona elegida.
Sólo faltaba que los sargos apareciesen.
A pesar de que la previsión meteorológica anunciaba temperaturas cálidas para el mes en que nos encontramos, la mañana se había despertado fresca y con algo de niebla en puntos concretos.
Desde este emplazamiento, el islote de A Marola se me asemejaba a una enorme tortuga, desplazándose por el mar.
Mientras Luis, Antonio y Adolfo, proseguían con la pesca, me dediqué a tomar unas cuantas instantáneas del entorno.
Las gaviotas se mostraban muy atentas a nuestros movimientos, ya que por veces nos acercábamos a sus zonas de descanso.
Durante la jornada me llamó la atención este transatlántico que salía del puerto de A Coruña, pues pocas horas antes lo había visto llegar.
Al igual que Antonio y Adolfo, Luis fue probando en distintas zonas de la costa, para localizar a los esquivos sargos.
Aquí el mar también presentaba un buen aspecto, sin embargo los espáridos no daban la cara.
En esta zona de la costa pude visitar varias furnas. Estos agujeros creados por la acción del mar son espectaculares. Especialmente cuando el agua sale pulverizada hacia arriba, después de que el mar se adentre por la parte inferior.
En la distancia, el faro en funcionamento más antiguo del mundo, patrimonio de la humanidad: La Torre de Hércules.
Finalmente, mis compañeros dieron por concluida esta jornada, en la que los peces no habían hecho acto de presencia. Los otros pescadores que allí se encontraban, habían corrido la misma suerte.
Fue el momento perfecto para ir a comer y pasear un poco por la ciudad, ya que Luis había quedado con alguna gente.
Contacté con Walter, para comentarle que me encontraba en A Coruña, con tan buena suerte que estaba con David y otro amigo pescador, en La Cervecería de la Estrella Galicia.
Así que allí nos reunimos todos para finalizar una jornada de pesca, de la mejor manera posible ... charlando de pesca jejeje.
Tras despedirnos de nuestros amigos, nos aguardaban dos horas de conducción hasta casa de Luis. Y una hora más de coche para mí, para llegar al hogar.
1:30 am. !!Por fin en casa¡¡ Tocaba irse a dormir y descansar.
Con la Estrella de Galicia. Así cualquiera se quita la agujetas.
ResponderEliminarPues la verdad es que quizás sea un bálsamo que la gente desconoce, José Manuel.
EliminarCuando tenga agujetas, veré si con la Estrella se pasan antes jejeje.
¿Que no tenias agujetas? Si yo al terminar de leer la entrada no podía ni moverme ¡De la que se libró Bulma! Quiero parte de la patente, en?.Ja
ResponderEliminarPues no. Más bien tenía el culo magullado por las rocas tan incómodas en las que me tocó sentarme.
EliminarBulma se hubiera dejado las almohadillas.
Estoy pensando nombre para el producto ... Estrelleta,Agulicia, etc jejeje
Olá Josiño!
ResponderEliminarAqui está a prova de como não é preciso muito peixe para fazer um bom relato de pesca... Bonitas fotos da Natureza sem duvida e que bons pesqueiros de sargos...
Saude e força aí.
É certo Pedro. Ás veces, unha imaxe vale tanto coma unha captura.
EliminarSaúdos
Que guapina Bulma!
ResponderEliminarLas puestas tenían una pinta preciosa, y el tiempo parece que os acompañó.
Un saludo Josiño!!
La Bulma es un sol, Txatxangorri.
EliminarLa conclusión fue que los sargos aún no están por la zona.
Saludos
Hola José. Cómo sabemos en la pesca no siempre se gana,lo cual no es obstáculo para disfrutar de la jornada, sobre todo entre esos hermosos paisajes.Ademas esas reuniones imprevistas con amigos son de lo más reconfortantes.Un día completo. Saludos desde Cáceres.
ResponderEliminarBueno Javier, yo siempre extraigo lo positivo, con lo cual gano en cada jornada.
EliminarCoincido en que estar con los compañeros de afición, es lo mejor.
Saludos
Jornada maratoniana!!!!! Siempre un gusto poder pescar con amigos
ResponderEliminarSi que lo fue, Ander.
EliminarAunque con los amigos se lleva mejor jejeje.
Saludos
Buena jornada, pese a que la costa Ártabra no fue generosa con sus impredecibles sargos ..
ResponderEliminarssddss
Pescar en ese escenario fue todo un placer, Javier.
EliminarSi fuera en domingo igual te veíamos palear jejeje.
Saludos
Hola José! Como ya sabemos en la pesca no siempre se gana, pero eso no es impedimento para disfrutar de la jornada, y menos aún en ese entorno que es un regalo para los sentidos,muy bonitas fotos y oportunamente detalladas, además esas reuniones imprevistas con amigos son de lo más reconfortantes. Un día perfecto sin duda. Saludos
ResponderEliminarEs cierto Javi.
EliminarPude hacer fotos muy chulas, aprovechando el escenario.
Saludos
Jornada maratoniana, destacar la peligrosidad de la zona tanto como su belleza. Que pena que los sargos no acompañarán. Las fotos muy bonitas, como suele ser costumbre en tí. Para acabar la jornada que mejor que compartir una cerveza con los amigos hablando de lo que más nos gusta.
ResponderEliminarPues sí Chencho. Demasiadas horas en pie.
EliminarSin embargo hay que saber sacar jugo a cada salida.
Saludos
Después de una bonita jornada la cervecita que no falte, jajajaja. Unas fotos muy chulas Josiño. Un abrazo
ResponderEliminarLos capotes, con cervecita y colegas, se lleva mejor. ¿Verdad David? jejeje
EliminarSaludos
Buenas Jose,pues sí estoy contigo,después de currartelo a pie de orilla nada mejor que unos tragos de cerveza fría con compañeros de pesca y amigos,que muchas veces solo nos vemos en los pesqueros y ni tiempo para estar un rato porque nos esperan en casa.Un saludo.
ResponderEliminarEs cierto Iván. Y más cuando son colegas que no ves a menudo.
EliminarHay que organizarse.
Saludos