Haciendo un pequeño juego de palabras, rememorando a los tres mosqueteros, cuyo lema era "Todos para uno y uno para todos", me dispongo a narraros una salida de pesca, en compañía de Luis y de Xiao, tras los basses.
A mediados de septiembre me propuse hacer una jornada completa con la técnica del drop shot, logrando algunos dobletes y una jornada excelente, así que me dispuse a mostrarle la técnica a mis grandes amigos Luis y Xiao.
Días después quedé con ellos para pasar una tarde agradable. El caso es que me harté a sacar black bass, si bien no me paré a tomar fotografías de los peces. Opté por capturar grandes recuerdos de mi ahijado con la caña en la mano. Ahora ya apunta buenas maneras y el próximo año, seguro que ya nos moja la oreja a su padre y a mí jejeje.
Los basses están bien alimentados, dado que el cangrejo americano ha proliferado en gran número.
En la orilla se aprecian muchos caparazones vacíos, pero también se ven a otros saliendo y entrando en sus galerías.
Con un equipo ultraligero, un pequeño bass se convierte en un gran rival. Pescarlos con estos equipos aumenta las sensaciones e iguala un poco la contienda.
Xiao lo hizo muy bien y sacó muchos ejemplares. En tierra a veces no le resulta muy fácil hacerse con ellos, pero su paciencia le alza con el triunfo en estas contiendas jejeje.
Ya estoy deseando que vuelvan a estar muy activos estos peces, para que podamos disfrutar de más jornadas como esta.